ALGÚN DÍA SEREMOS MUERTOS

 

El desierto avanza.

Orfandad oceánica.

El vértigo reemplazó al éxtasis,

las discotecas a los templos.

 

*

Angustia: angostura del camino que se nos estrecha.

Misterio: el que nos habla con la boca cerrada a nuestros oídos ciegos.

Ansiedad: hija del vértigo, pánico de estar vacío… de ni siquiera

merecer el desprecio de Dios, ni el aprecio de Satanás.

 

*

Ruido: cobijo del presente.

Imperio de lo sagrado: fugado.

 

*

Cementerio sin lluvia.

Ojos sin luz.

Boca sin aura.

Mano sin caricia.

Pecho sin calor.

Mar sin barcos.

Plegarias sin dioses.

Pecado sin encarnación.

 

*

Algún día seremos muertos y todas las cosas seguirán su nada,

la nada que nos abriga mientras el desierto avanza ya sin nosotros.