Acercábamos las cáscaras
al fuego de las hornallas
y las apretábamos
para exprimirles
todo el aroma dorado
y todas las estrellas
anaranjadas posibles.
Acercábamos las cáscaras
al fuego de las hornallas
y las apretábamos
para exprimirles
todo el aroma dorado
y todas las estrellas
anaranjadas posibles.