Me fui del paisaje.
Sólo quedo en mí
una insignia.
Mi composición,
que cantó un réquiem
a su color extinto
escuchó la lejanía
sobre mi voz,
sólo
en las palabras,
habitantes.
Mínimas.
Últimas palabras.
Guardo verdor
para este recuerdo.
Me fui del paisaje.
Sólo quedo en mí
una insignia.
Mi composición,
que cantó un réquiem
a su color extinto
escuchó la lejanía
sobre mi voz,
sólo
en las palabras,
habitantes.
Mínimas.
Últimas palabras.
Guardo verdor
para este recuerdo.