LA PATRIA DEL SAUCE

               “Está en todo mi corazón pero allí también

               estuvo mi infancia…”     JUAN L. ORTIZ

 

Oh yo detenido sobre este puente

y después más abajo

tocando ya el entretejido

que se aleja hacia el mar y hacia el norte

no de la corriente sino del destino.

Pero también por aquí

pasa la gente

por la sed o la sombra

o la “vista”

o el alimento blanco y subfluvial.

 

Aquí la vida no es esa precipitación

hacia la abrupta decoración

de los desniveles del confort

es, en cambio, el testimonio intransferible

el intervalo entre esas notas sencillísimas

que apenas armonizan

el minuto de la soledad

aún contra los grillos de enero.  

Nada más que un sueño amarillo que se va entre los talas

detrás de un vuelo bajo y encendido de verdes.

Este paisaje es mi alma y será siempre mi alma.

Son las flores, las de antes todavía,

mientras las otras duermen tras las tapias.

Mientras, también, otra gente

piensa en cuadros y en vestidos

en negocios serviles,

porque qué puede ser sino siervo

quien trafica el perfume de su tierra

y entrega su idioma

en manos de grasientos mercaderes?

Oh arroyo Villaguay

en el corazón mismo de las cuchillas de Montiel

en el centro casi

de la provincia de la esperanza

guardado por viejas criaturas

y precoces perfecciones

desdichado de mí

entre tantos

pájaros mortales.

 

Villaguay  (e/ríos)  -  1974