EL VIENTO SE LLEVÓ LO POCO QUE QUEDABA

De  “Lo que no fue es resplandor” (2005)

 

Tuve un muñeco y una calle de polvo,

un juego que perdí. En otro tiempo.

Yo no soy responsable

de todas mis derrotas:

el viento me lo dijo, el campo lo afirmó.

 

Yo tuve una escalera y un cielo con parientes.

Un montón de ilusiones que ya no me conforman.

Visitaba a mi abuelo noche y día.

Hoy visito esta ausencia de camisa y pantalón.

 

Yo fui un niño sin niño,

un retrato gastado por ciertas circunstancias.

 

Yo tuve un horizonte de provincia.

El deseo de ser, sin ser un apellido,

sin ser la descendencia de quienes no descienden.

 

Yo tuve ese muñeco que hoy pasea conmigo.

A veces, siento miedo de que él pueda ser yo.