LUNES


Yo no me explico,
este aferrarme al borde de tus días.
Este dejarme estar,
en la completa laxitud
de los gestos inmóviles,
contando los latidos impetuosos,
como revoloteos 
de prisioneras aves
emplumadas de luz.

No quiero darme cuenta
que este lunes termina
atado al movimiento inexorable
de dos agujas negras,
(no se detiene el tiempo 
por un par de deseos compartidos)

Voy a llenar las hoscas impaciencias
de postreros minutos,
reflejado en los lagos apacibles
de tus ojos profundos,
y goteando palabras,
breves,
dulces,
como si cada una
tuvieran su importancia.

( texto de Poema de los siete días, 
de "La soñada armonía")