CARTA A FRANCISCO TOMAT GUIDO

Cedida gentilmente por Romina Tomat - Ver datos del destinatario en Rescates

Francisco Tomat Guido

diario CLARIN

RESISTENCIA, 8 de abril de 1976

Mi querido Guido: Acabo de leer y releer con pasión tu artículo sobre "Poesía y realidad de nuestro tiempo", en el CLARÍN de hoy. Ojalá que esta carta llegue a tus manos (no tengo tu dirección particular), para expresarte mi agradecimiento personal -no por haber puesto mi foto en tu nota - sino porque en tu nota, abres camino a un panorama que, muchos de nuestros compañeros de generación no ven claro, aun cuando yo tengo la evidencia y el trato directo con otros poetas (más jóvenes que nosotros) que sí, estoy seguro, leerán y comprenderán a fondo tu anális1s. Hace poco salió en La Prensa, un artículo de Jorge Calvetti, que me dolió, porque atribuía a la falta de lectores, el hecho de que HOY la poesía fuera más "un teorema" que un discurrir por el sentimiento, negando la enorme cantidad de poesía joven que por el contrario, busca en esas dos vertientes que vos has nombrado para siempre, incorporar "la historia" en el gran sentido que tiene esta cuando se hace poesía vital. Ah, el artículo de Jorge se llamaba "Poesía era la de antes..." (lo leíste?) Mi experiencia personal, ha sido el trato con hombres como José Luis Romero o Canal Feijoo, donde he encontrado un eco que no tienen mis poemas en el terreno de la contemporaneidad inmediata, o como te digo, en poetas menores de 30 años, que sienten que estamos hablando el mismo lenguaje (lenguaje de los comics, o del cine, o de los diarios, o de los fascículos, o de la técnica, o de la ciencia en un continuo desfasaje entre el tiempo actual, y el pasado. A partir de Puntos Luminosos, intenté esas rupturas, y en El Imperio Milenario, abrí las compuertas en forma definitiva. Ahora, tengo en Sudamericana otro libro, La máquina del mundo, en donde arriesgo más lenguajes, a veces con humor, a veces con un "hiper-realismo" crítico (como lo llamó (Miguel Eduardo Dolan), a ratos con datos extraído de manuales o enciclopedias. Por qué? Porque pienso que esas enciclopedias de quioscos, o fascículos de culturas diversas, son para nosotros los mayores, una forma de historieta ilustrada de lo cotidiano. La fórmula si la hubiera, sería una suma de todos esos elementos, en estado de delirio. Y el lenguaje coloquial, como vos me decís, el medio más apto. He utilizado allí, un lenguaje poético hecho de "transparencias" (no el "collage") sino la superposición de un idioma de texto (La Historia del Gran Chaco, de Jolís, Siglo XVII, por ejemplo, y otro de informaciones que "traducen", indirectamente, sentimientos personales o sueños muy profundos. No por vanidad, sino porque coincide con tu planteo, te transcribo un fragmento de una carta de don Bernardo Canal Feijoo: “De muchas formas o modos es susceptible la poesía, y todas óptimas cuando es verdadera. La suya comparte holgadamente esta jerarquía con la que puede ser tenida hoy por la mejor. Pero además la hallo primera, y hasta hoy única, en todo el panorama por un rasgo fundamental que no me sería fácil explicar. Es la poesía -no la concibo de otro modo- de la nueva concepción del mundo y el destino humano que estamos viviendo, con la física nuclear y la cosmonáutica y la ciencia ficción y la electrónica substituidas a todas las místicas antiguas tan meramente subjetivas. Compréndame lo que quiero decirle: no que su poesía sea la poesía de la física nuclear, o de la ciencia ficción, etc., sino de la concepción del mundo, o de la nueva cosmovisión suscitada (o inscrita) entre todos esos datos, comunes ahora a toda la humanidad, y en el caso suyo "substanciados" por un pathos muy personal de sensibilidad telúrica, de sentimiento de suelo, del barro primordial, de barro biológico animal y vegetal, que lo atribuyo a su condición mesopotámica y al privilegio de vivir en esa precisa zona argentina, donde los jesuitas soñaron en una "civitas dei" y los profanos en "un paraíso de Mahoma"…"

Perdona esta larga transcripción que puede parecer pedante, pero en verdad, hace muchos años que busco expresarme dentro de esas coordenadas que vos ahora descubrís para otros, para los nuevos. Te agradezco por eso, tu apoyo "indirecto" a mis propias convicciones, maduradas en la soledad de mi mesa de trabajo. Y te mando un ejemplar de El Imperio… no sé si lo tenés, por eso no va dedicado, para que lo hagas circular si te viene bien, y un ejemplar de una HOJA DE POESÍA que trae unos breves anticipos de La Máquina del Mundo. Ojalá me digas que esta carta llegó a tus manos en la febril redacción del diario. Tuyo, con un gran abrazo fraternal.